El Gobierno avanzó hoy con la quita de subsidios energéticos que forma parte del nuevo esquema de segmentación tarifaria. Según estimaciones oficiales, esta decisión implicará un ahorro superior a los $3.000 millones anuales.
Desde el oficialismo aseguraron que este paso es fundamental para continuar ordenando las cuentas del Estado y, a la vez, generar condiciones que favorezcan el desarrollo económico a largo plazo.
El monto ingresará por la quita de subsidios a la energía eléctrica a más de 15.500 usuarios de Puerto Madero y barrios cerrados del AMBA.
Para llegar al número final, “el análisis se realizó mediante herramientas de Sistemas de Información Geográfica (GIS) y bases de datos espaciales (PostGIS), con datos abiertos provistos por ARBA y el OPISU (Organismo Provincial de Integración Social y Urbana)” informó en el comunicado la Secretaría de Energía del Ministerio de Economía.
Además, sumó que “la recategorización automática implica que estos usuarios serán excluidos del Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE)”, pero, a su vez, “se habilita un procedimiento de revisión individual -en el cual- los usuarios afectados podrán presentar un reclamo a través de la plataforma Trámites a Distancia (TAD).
“Esta decisión marca un punto de inflexión: se terminó el subsidio para quienes no lo necesitan”, sumaron y concluyeron en que la decisión va contribuir con el “ordenamiento macroeconómico, al saneamiento del sistema tarifario y a la reducción del gasto público improductivo”.