Marín admite que la planta de GNL en Río Negro no se construirá porque usarán barcos

Marín admite que la planta de GNL en Río Negro no se construirá porque usarán barcos

El presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, admitió que no se construirá la planta de GNL en Río Negro y dijo que el proyecto será reemplazada por barcos. La decisión de tomó meses después de librarse una batalla entre el gobernador de esa provincia, Alberto Weretilneck, y su par de Buenos Aires, Axel Kicillof.

“Serían todos near floting NLG, que son barcos fábrica que están cercanos a la costa y que todos los servicios, como energía, agua y más, se hacen desde la tierra y eso logra una eficiencia mayor en los barcos que lo hace más rentable y más posible”, dijo Marín en declaraciones periodísticas.

En esa línea, continuó: “Además, los tiempos son mucho más rápidos -que los de construcción de una planta terrestre- y son todos llave en mano, en donde vos sabés exactamente lo que te va a costar”.

El proyecto

La planta de licuefacción de Gas Natural Licuado (GNL) estaba previsto construirse en Sierra Grande, Río Negro. La inversión rondaba los 30.000 millones de dólares.

Río Negro fue la primera provincia de la Argentina en adherir al Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI), algo que Kicillof no hizo al preferir impulsar un marco normativo propio.

Una respetada consultora internacional fue contratada por YPF para evaluar el proyecto y consignó que la mejor opción para ambas empresas era la localidad rionegrina, por encima de la ciudad bonaerense de Bahía Blanca.

Se trató de un golpe durísimo para la gestión de Kicillof, que fue primeriado desde el inicio por Weretilneck que utilizó todas las herramientas políticas disponibles como, por ejemplo, enfriarle el proyecto de Boleta Única de Papel (BUP) al oficialismo en el Senado, el año pasado.

El proyecto abarca exportaciones de 460 barcos anuales por unos 120 millones de m3 diarios (MMm3/d) de gas natural y una suma 15.000 millones de dólares en ventas al exterior.